La anquiloglosia o frenillo corto es una condición que afecta a la lengua y que puede tener efectos negativos en la salud bucal. En este artículo, te explicaremos en detalle qué es la anquiloglosia, cómo se diagnostica y cuáles son las opciones de tratamiento disponibles.
¿Qué es la anquiloglosia o frenillo corto?
La anquiloglosia o frenillo corto es una condición en la que el frenillo lingual (el tejido que conecta la lengua con la base de la boca) es más corto de lo normal, lo que puede limitar la movilidad de la lengua. Esta condición también se conoce como «frenillo lingual corto» o «tongue-tie» en inglés.
Síntomas de la anquiloglosia o frenillo corto
Esta afección puede causar una serie de síntomas y problemas, especialmente en bebés y niños pequeños. A continuación, te contamos los síntomas más comunes.
Problemas de lactancia
Uno de los síntomas más comunes de la anquiloglosia en los bebés es la dificultad para amamantar. Debido a que el frenillo lingual está demasiado corto o tenso, puede resultar difícil para el bebé succionar adecuadamente.
Esto puede llevar a una mala alimentación, bajo aumento de peso y otros problemas relacionados con la nutrición.
Problemas de habla
En los niños mayores, puede afectar el habla. Debido a que el frenillo lingual restringe el movimiento de la lengua, puede resultar difícil pronunciar ciertas palabras y sonidos correctamente.
Puede provocar a una pronunciación incorrecta, tartamudeo y otros problemas de habla.
Dolor al tragar
En casos más graves, el frenillo lingual puede restringir el movimiento de la lengua de tal manera que cause dolor al tragar.
Por esto, puede haber dificultades para tragar alimentos y líquidos, así como a una sensación de opresión en la garganta.
Problemas dentales
La anquiloglosia también puede tener un impacto en la salud dental. Debido a que el frenillo lingual puede restringir la capacidad de la lengua para limpiar los dientes y las encías, puede aumentar el riesgo de caries y enfermedad periodontal.
También puede llevar a una mala higiene oral en general.
Causas de la anquiloglosia o frenillo corto
Esta afección puede ser causada por una variedad de factores. Te explicamos algunas posibles causas:
Causas congénitas
La mayoría de los casos son congénitos, lo que significa que ocurren durante el desarrollo del feto y el bebé ya nace con el frenillo lingual corto o adherido. Esta afección suele ser hereditaria y puede ser causada por una mutación genética.
Causas adquiridas
En algunos casos, puede ser adquirida después del nacimiento debido a una lesión o trauma en la lengua o en el frenillo lingual. También puede ocurrir después de una cirugía o radioterapia en la cabeza y el cuello.
Causas desconocidas
En otros casos, no se puede identificar la causa. Sin embargo, se sabe que esta afección afecta más comúnmente a los hombres que a las mujeres y a los niños que a los adultos.
Es importante mencionar que la anquiloglosia puede ser un problema hereditario, por lo que si un miembro de la familia tiene esta afección, es posible que otros también la tengan.
Además, también puede estar asociada con otros trastornos, como el síndrome de Down o el síndrome de Ehlers-Danlos.
Diagnóstico de la anquiloglosia o frenillo corto
Para el diagnóstico en bebés, el pediatra o el dentista pueden realizar una evaluación visual para determinar si el frenillo lingual es corto.
En adultos, el diagnóstico puede ser un poco más complicado y puede requerir la realización de una prueba de movilidad lingual.
No obstante, estas son las diferentes pruebas que se realizan para un diagnóstico preciso:
Evaluación clínica
El diagnóstico de la anquiloglosia comienza con una evaluación clínica realizada por un especialista en trastornos del habla o un dentista. Durante la evaluación, se examina la lengua del paciente y se evalúa la movilidad y la función de la lengua.
Escala de Kotlow
La escala de Kotlow es una herramienta utilizada por los especialistas en trastornos del habla y los dentistas para evaluar la anquiloglosia en niños y adultos. La escala mide la longitud del frenillo y la distancia desde el frenillo hasta la punta de la lengua.
Cuanto más corto es el frenillo y más cerca está de la punta de la lengua, más probable es que la persona experimente síntomas de frenillo corto.
Prueba de la cuchara
La prueba de la cuchara es una prueba simple que puede ayudar a determinar si una persona tiene frenillo corto. Durante la prueba, se le pide al paciente que abra la boca y se coloca una cuchara debajo de la lengua.
Si el frenillo es demasiado corto, la lengua no podrá moverse adecuadamente y la cuchara se moverá con dificultad.
Evaluación del habla
La evaluación del habla es importante para determinar cómo la anquiloglosia está afectando la capacidad de una persona para hablar y comunicarse.
Durante la evaluación, se observa la calidad del habla y se evalúa la movilidad de la lengua y la capacidad de pronunciar ciertos sonidos y palabras.
Tratamiento de la anquiloglosia o frenillo corto
El tratamiento de la anquiloglosia depende de la gravedad de la condición y de los síntomas que experimente el paciente. En algunos casos, no se requiere ningún tratamiento y la anquiloglosia no causa problemas significativos.
Sin embargo, en otros casos, puede ser necesario realizar una frenotomía, que consiste en cortar el frenillo lingual para permitir una mayor movilidad de la lengua.
¿En qué consiste la frenotomía?
La frenotomía es un procedimiento sencillo que se realiza en consultorio dental bajo anestesia local. El dentista o cirujano realiza un pequeño corte en el frenillo lingual para permitir una mayor movilidad de la lengua.
El procedimiento dura solo unos minutos y generalmente no requiere puntos de sutura.
¿Qué cuidados se deben tener después de una frenotomía?
Después de una frenotomía, se pueden experimentar algunas molestias en la lengua y en la zona de corte durante unos días.
Es importante evitar alimentos duros o picantes y mantener una buena higiene bucal para prevenir infecciones. El dentista o cirujano puede recomendar el uso de analgésicos y enjuagues bucales especiales para ayudar con la recuperación.
¿Qué consecuencias puede tener la anquiloglosia si no se trata?
Si no se trata, puede tener consecuencias negativas en la salud bucal a largo plazo. Algunos de los problemas que pueden surgir incluyen la aparición de caries, problemas de mordida y dificultades para mantener una buena higiene bucal.
Además, la anquiloglosia no tratada puede tener efectos negativos en el habla, la alimentación y el desarrollo de los niños.
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En resumen, la anquiloglosia es una condición que puede causar molestias y dificultades en la vida cotidiana de una persona. Si crees que puedes estar experimentando síntomas, es importante buscar atención médica para recibir un diagnóstico y tratamiento adecuados.
En nuestra clínica dental Ramis Gandía contamos con profesionales altamente capacitados y equipados con la última tecnología para ofrecer soluciones efectivas y personalizadas a nuestros pacientes.
Si estás buscando tratamiento para la anquiloglosia o cualquier otra condición dental, no dudes en contactarnos para programar una consulta.
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